domingo, 26 de agosto de 2012

Impublicable XI.


Será que hubo tiempo
de mirarnos hacia adentro,
y comprobar que no habían
mudado, los años,
los pilares del templo,
será que nos quedamos así,
mientras el retrovisor,
nos mostraba lo que éramos,
sin piedad,
sin tacto,
será que tomaste tu equipaje de la cinta,
será que subí al furgón,
será que nunca más,
y qué frase
más fácil y más gastada,
será que nunca más nos vimos.

Impublicable X.


En una o dos tardes de lluvia,
se puede, entre otras cosas,
ir por la costanera,
pisar la arenilla,
ojear el mar,
y contentarse,
sentirse fluír en las calles,
interceptarse, de casualidad,
con el frío sudor
de las mañanas...
Está permitido,
extender las alas,
y sobrevolar,
la bruma de nostalgia,
que se hace vapor;
y ya entonces,
cuando no queda espacio
para la neblina,
uno también puede
hacer escala,
en algún arcoiris.

lunes, 20 de agosto de 2012



Qué se puede hacer
con éste rojo amanecer...
volverlo tal vez al mar,
quedarse con él en algún bolsillo,
o, en fin,
observarlo y disminuírse,
ensimismarse,

perderse entre el abrir y el cerrar
de los ojos,
o liberar éstos versos
en un bote vacío...
Qué se puede hacer
con éste rojo amanecer...
se preguntan los estibadores
camino al puerto,
con esa autoritaria
razón con que nace el día,
y parte sin piedad la mañana,
vivirlo tal vez,
creerlo quizá...
Qué se puede hacer con ésta
roja odisea... Piensan los habitantes de
la madrugada,
regalarle flores,
quitarse el sombrero,
y de buena costumbre,
callarse la boca,
reverente mañana,

no sé si de luz o de sombra,
menos mal que te llevamos
dentro y a todas partes...
Qué se puede hacer
con esa roja explosión florida,
que tiñe las pisadas
de hielo e historias
Qué se puede hacer,
sino caer en sus brazos
dicen las malas lenguas,
Qué se puede hacer,
con éste pentagrama de oro...
si no lanzar los suspiros al estrecho,

y escuchar cómo sobrevive
el oleaje en fa menor.

domingo, 12 de agosto de 2012