sábado, 9 de junio de 2012

Impublicable IX















Fulano... y pensar que

no sólo tienes dos pies,
manos, ojos, piernas,
labios, boca, y qué boca,
una forma de caminar,
camisas, colleras,
zapatos formales,
llagas de algún resfrío,
tres o cuatro malos recuerdos,
cien o miles de buenos...
pensar que también,
usas Jeans, bebes cervezas,
en esos jarros estampados,
de un pintoresco paisaje alemán...

Pensar que alguna vez,
quizá por inercia,
caminaste por Lautaro Navarro,
con Carrera Pinto,
y viste cómo el río seguía su curso,
y dijiste para tus adentros,
qué no había novedad...
qué los miércoles son aburridos,
que te apesta,
salir de la oficina a esa hora...
y que los directores,
son una mala hierba que
se multiplica en los días de lluvia....

Fulano, pensar que vives
en un hogar, con tus padres,
hermanos, o amigos,
que hablas como los
nocturnos de Chopin,
y que tal vez,
en alguna remota noche,
sentiste miedo de la densidad
nocturna,
y jalaste la cuerda,
y se hizo la luz, tu paz,
y cerraste los ojos,
duerme, cariño, duerme....

Fulano, ¡Y qué eres!,
pensar.... quién lo diría,
que tienes, una vida, un futuro,
un pasado de lujo,
un ritmo tranquilo,
las manos al bolsillo,
el bolso a la espalda,
mirada de frente,
una ligera inclinación,
ingleses modales,
un objetivo,
o más de uno, tal vez....

Fulano, y pensar que tienes,
un nombre y un apellido,
y un verso,
qué anónimo,
se ha venido a regalar.