Este elixir conduce a la perdición. A la perdición de los caracoles.
Cuando oscurece, ellos salen de sus escondrijos y a ritmo de caracol avanzan dispuestos a devorar la carne verde de las plantas. En medio de la huerta, un vaso de cerveza monta guardia. Es una tentación irresistible. Llamados por el aroma, los caracoles trepan a lo alto del vaso. Desde el filo del abismo, se asoman a la sabrosa espuma y cuesta abajo resbalan, dejándose caer. Y en la mar de cerveza, borrachitos, felices, se ahogan.
Eduardo Galeano, Bocas de tiempo.
miércoles, 27 de abril de 2011
Fragmentos. (La mala hora)
-"No debían existir los lunes" -dijo el juez.
El barbero había empezado a cortarle el cabello.
-"Son culpa del domingo -dijo-. Si no fuera por el domingo -precisó con un aire alegre- no existirían los lunes"
- La mala hora -.
El barbero había empezado a cortarle el cabello.
-"Son culpa del domingo -dijo-. Si no fuera por el domingo -precisó con un aire alegre- no existirían los lunes"
- La mala hora -.
domingo, 10 de abril de 2011
Fragmentos.
Todo hacía pensar que Amaranta se orientaba hacia una felicidad sin tropiezos. Pero al
contrario de Rebeca ella no revelaba la menor ansiedad. Con la misma paciencia con que
abigarraba manteles y tejía primores de pasamanería y bordaba pavorreales en punto de cruz,
esperó a que Pietro Crespi no soportara más las urgencias del corazón.
(Relativo a Amaranta Buendía. Cien años de soledad - Gabriel García Márquez)
<<No soporto más ésta espera>>, Le dijo <<Nos casamos el mes entrante>> Amaranta no tembló
al contacto de sus manos de hielo. Retiró la suya, como un animalito escurridizo y volvió
a su labor.
- No seas ingenuo, Crespi -sonrió-, ni muerta me casaré contigo.
(Amaranta a Crespi. Cien años de soledad - Gabriel García Márquez)
contrario de Rebeca ella no revelaba la menor ansiedad. Con la misma paciencia con que
abigarraba manteles y tejía primores de pasamanería y bordaba pavorreales en punto de cruz,
esperó a que Pietro Crespi no soportara más las urgencias del corazón.
(Relativo a Amaranta Buendía. Cien años de soledad - Gabriel García Márquez)
<<No soporto más ésta espera>>, Le dijo <<Nos casamos el mes entrante>> Amaranta no tembló
al contacto de sus manos de hielo. Retiró la suya, como un animalito escurridizo y volvió
a su labor.
- No seas ingenuo, Crespi -sonrió-, ni muerta me casaré contigo.
(Amaranta a Crespi. Cien años de soledad - Gabriel García Márquez)
Fragmentos.
"Pero lo que me preocupa, no es que me fusiles, por que al fin y al cabo, para la gente
como nosotros, esto es la muerte natural" "Lo que me preocupa -agregó- es que de tanto
odiar a los militares, de tanto combatirlos, de tanto pensar en ellos, has terminado por ser
igual a ellos. Y no hay un ideal en la vida que merezca tanta abyección"
(Gerineldo Márquez al Coronel Aureliano Buendía, Cien años de Soledad, Gabriel García Márquez)
como nosotros, esto es la muerte natural" "Lo que me preocupa -agregó- es que de tanto
odiar a los militares, de tanto combatirlos, de tanto pensar en ellos, has terminado por ser
igual a ellos. Y no hay un ideal en la vida que merezca tanta abyección"
(Gerineldo Márquez al Coronel Aureliano Buendía, Cien años de Soledad, Gabriel García Márquez)
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